Trabajadores sin escritorios
Según el estudio The state of technology for the deskless workforce publicado por Emergence a finales de 2020, el 80 % de los empleados actuales no trabaja delante de un escritorio o desde una oficina.
Esto representa un total de alrededor de 2700 millones de trabajadores en todo el mundo. Gran parte de este personal fuera de la oficina se reparte entre una amplia gama de sectores, como la sanidad, la agricultura, el transporte, el comercio minorista o la fabricación. Estos trabajadores de primera línea son la pieza clave de la economía global.
Sin embargo, aunque la gran mayoría de las organizaciones empresariales actuales invierten en tecnologías nuevas e innovadoras para mantener una ventaja competitiva y conseguir mayor poder en el mercado, muchas se quedan atrás cuando se trata de invertir en personal sin escritorio.
¿Se ha olvidado al personal sin escritorio como mano de obra?
A la hora de desarrollar soluciones inteligentes para el lugar de trabajo, como software colaborativo, plataformas de videoconferencia o herramientas de comunicación en equipo, las empresas de alta tecnología no suelen pensar en los trabajadores de primera línea, sino que diseñan sus productos únicamente para su uso en oficinas. Y al hacer esto, ignoran a la gran mayoría de trabajadores a nivel mundial, es decir, al 80 %.
Esto puede explicarse por el hecho de que los empresarios tecnológicos y los desarrolladores de software no tienen ninguna experiencia profesional industrial y nunca han trabajado en puestos de primera línea. No han tenido que enfrentarse a los desafíos específicos a los que el personal fuera de la oficina se enfrenta día a día.
El lado positivo de esto es que existe un enorme potencial para que las empresas de alta tecnología se tomen en serio el futuro de los empleados sin escritorio. No obstante, tendrán que esforzarse y trabajar para entender cómo su tecnología puede ayudar a los trabajadores de primera línea a rendir mejor y aumentar la satisfacción en el trabajo.
Existe un enorme potencial para que las empresas de alta tecnología desarrollen tecnologías que puedan ayudar a los trabajadores de primera línea a rendir mejor
Los empleados fuera de la oficina también necesitan un lugar de trabajo inteligente
Al igual que los empleados de oficina, los trabajadores de primera línea se enfrentan a desafíos diarios que la tecnología podría ayudar a resolver. Ellos también necesitan un lugar de trabajo inteligente, lo que implica la digitalización de, por ejemplo:
- herramientas de organización como planificadores, paneles de flujo de trabajo o plataformas de programación;
- instrucciones y procesos de trabajo, y
- documentación interna.
Según la encuesta de Emergence, el 75 % de los empleados sin escritorio se apoyan en la tecnología para hacer su trabajo y pasan el 75 % de su tiempo utilizándola. El 60 % de ellos no están satisfechos con la tecnología que se les proporciona: describen las herramientas digitales como demasiado lentas, anticuadas o difíciles de entender y utilizar, y además exponen que no facilitan la colaboración.
Dado que muchas soluciones son de escritorio, no están necesariamente disponibles en móviles o tabletas, y por lo tanto no son adecuadas para los trabajadores a distancia. Por tanto, el 56 % de los empleados fuera de la oficina usan su propia tecnología para solucionar este problema.
Tecnologías eficientes para los trabajadores de primera línea
Aunque la pandemia haya acelerado la implementación de nuevas tecnologías, todavía el 25 % de las empresas señala que no saben si hay alguna tecnología disponible para su sector y su caso de uso.
Los trabajadores fuera de la oficina también necesitan soluciones para el lugar de trabajo inteligente que les capaciten, les hagan participar y que les proporcionen muchas funcionalidades
En conclusión, la necesidad de herramientas digitales del personal sin escritorio representa una gran oportunidad de negocio para las empresas tecnológicas, con miles de millones de posibles usuarios. La creación de un espacio de trabajo que les capacite, les haga participar y que les proporcione muchas funcionalidades, debería ser su motivación a la hora de crear un lugar de trabajo inteligente para los trabajadores de primera línea. Así, se mejorarán las condiciones de trabajo, los trabajadores serán mucho más productivos y aumentará la satisfacción general.